Punto de partida: prepara tu espacio de entrenamiento en casa
Despeja al menos dos metros libres, retira alfombras resbaladizas y objetos frágiles. Si el suelo es duro, usa una toalla doblada o esterilla para rodillas y muñecas. Tener agua cerca y una ventana abierta marcará la diferencia en tu comodidad.
Punto de partida: prepara tu espacio de entrenamiento en casa
Deja tus zapatillas a la vista, programa una alarma amable y prepara una lista corta de movimientos para no dudar. Empieza con cinco minutos diarios. Cuéntanos tu ritual de inicio y suscríbete para recibir plantillas de microhábitos efectivos.